Todo lo que necesitas saber sobre la nueva imagen de la Junta de Andalucía
Ya es conocido por todos. La Junta de Andalucía presentó hace unas semanas la nueva imagen corporativa institucional, que se irá implantando poco a poco en los diferentes centros, soportes y medios. Tras casi 40 años desde la creación de la imagen actual creada por Alberto Corazón en 1985, y coincidiendo con el cambio de gobierno, veremos como el viejo logo da paso a la nueva A de Andalucía.
“El cambio de logo es parte del cambio, pero es el menor de los cambios (…) la mejora de la sanidad, la educación o el incremento de la calidad de vida de los andaluces son los verdaderos cambios que estamos propiciando”.
Elías Bendodo durante la presentación.
Este cambio coincide también con la conmemoración del cuadragésimo aniversario de la celebración del Referéndum del 28 de Febrero de 1980. Según dicen en la web de la Junta, «el nuevo diseño trata de aportar una imagen sintética, sólida y modernizada, con un gran peso visual, renovando forma y concepto hacia una estética reconocible y perdurable«.
El cambio de imagen también afecta al escudo institucional, aunque en menor medida, ya que ha sufrido pequeños ajustes: líneas más geométricas, redimensión de las figuras e incorporación de la bandera en las columnas. Se trata de un rediseño muy continuista con el que se ha perdido la oportunidad de corregir y mejorar ciertos aspectos como por ejemplo el kilométrico brazo derecho de Hércules. Tampoco entiendo a qué se refieren cuando hablan de la inclusión del capitel, ¿qué capitel?
La nueva tipografía corporativa, que se usa tanto para el escudo como para el logo es la Noto Sans HK, que puedes descargar de Google Fonts de manera gratuita. Una tipografía sencilla y funcional, nada especialmente memorable pero que al menos sirve para decir adiós a la Eras, lo cual es una buena noticia, y aportar mejor legibilidad y atemporalidad. También es de agradecer que por fin se haya corregido la falta de ortografía que tenía la versión anterior.
El color sin embargo permanece inamovible, el Pantone 356 que todos conocemos se mantiene para escudo y logotipo, y el negro se presenta como gran novedad cromática junto con un nuevo tono de verde para el icono, más luminoso y vivo, como alegoría de vitalidad, fuerza y renovación.
Ante el revuelo ocasionado con el estreno de la nueva marca, hemos tenido la ocasión de hablar con Juan Carlos Patrón, responsable creativo de la nueva imagen, para que nos explique cómo ha sido el proceso y conocer con más detalle un cambio que ha despertado mucha expectación y alguna que otra polémica.
¿Cómo llegó este proyecto a Happy Comunicación?
Este proyecto llega a través de una ronda de consultas que realiza la Junta de Andalucía a unas 20 empresas del sector del diseño y la imagen, entre las que está Happy Comunicación. El objetivo consistía en explorar ideas para realizar un restyling de la marca. A partir del briefing planteado presentamos una serie de propuestas que fueron superando un proceso de selección y descarte. Finalmente nuestra propuesta fue la que se aproximaba más al concepto de actualización de la marca, por lo que finalmente nos encargaron el diseño de la nueva imagen a través de un contrato menor.
¿Qué relación tienes con Happy Comunicación? ¿eres freelance? ¿colaboras con ellos?
Soy director de arte y creativo freelance. Tengo un estudio de diseño y comunicación visual, pero también colaboro habitualmente con otros estudios, agencias de publicidad y productoras audiovisuales. Algunas de estas colaboraciones son ya asiduas, como la que llevo manteniendo con Happy Comunicación desde hace ya un tiempo, asesorándoles y desarrollando proyectos de diseño gráfico, identidad corporativa y comunicación visual.
Recibir un encargo de esta envergadura debe suponer una gran responsabilidad, ¿qué es lo primero que pensaste?
Lo primero que advertimos fue la enorme complejidad y lo arriesgado del proyecto, porque se trataba de modificar una imagen fuertemente implantada y vinculada a valores emocionales, históricos y de identificación de toda una comunidad. Si además tenemos en cuenta que su creador es Alberto Corazón, una leyenda del diseño gráfico de nuestro país, el proyecto infundía el máximo respeto. Pero precisamente por todo eso también se presentaba como un proyecto enormemente ilusionante.
El logotipo de Alberto Corazón es una síntesis del escudo de Andalucía, con atributos de modernidad y dinamismo. Contiene, de forma sintética, los elementos definitorios del escudo: la bandera en forma de arco de medio punto se expande convirtiéndose en ondas que se proyectan hacia el exterior.
En el nuevo logotipo tenemos un triple concepto:
“A” como inicial de Andalucía. El empleo de la inicial A pone en primer lugar a Andalucía, como concepto principal e irrevocable. La identificación es inmediata entre el símbolo genérico y la región a la que representa.
“A” como síntesis de puerta. La propia geometría de la letra A actúa a modo de puerta, constituyendo una síntesis del arco de puerta presente en el actual escudo, pero añadiendo un carácter mucho más incisivo y rotundo.
“A” como flecha ascendente. La geometría similar a la de una punta de flecha orientada hacia arriba nos habla de ascenso, de recorrido, de carácter positivo y de futuro.Andalucía, aperturismo, positivismo, ascenso y futuro.
¿Cuánto tiempo has estado trabajando en este proyecto?
Se empezó a trabajar en las primeras propuestas alrededor del mes de junio de 2019. Ha sido por tanto un trabajo de unos cuatro o cinco meses en los que se han elaborado diferentes propuestas, enfoques creativos y conceptuales hasta dar con la conclusión final de la A de Andalucía.
¿Cuánta gente ha participado en él?
Ha participado un equipo multidisciplinar, empezando por la gente de Happy Comunicación, liderados por Francis Romacho, Alejandro Moreu, productor especializado en comunicación visual y audiovisual y yo que he ejercido la tarea de dirección de arte y creatividad.
¿Cuál fue el principal objetivo que se perseguía con la nueva imagen?
Todas las marcas acaban acusando el paso del tiempo y más aún en los últimos años, en los que estamos viviendo una constante revolución en las formas y modos de comunicación, así que el eje vertebrador de la propuesta era crear una imagen que respondiera a estos nuevos códigos de comunicación. Otro de los objetivos fundamentales y personalmente creo que más difíciles, era dar con una propuesta que tuviera un valor representativo para toda una comunidad, con la capacidad de aunar a todos los andaluces, siendo respetuoso con todas las sensibilidades sociales, locales, políticas o de cualquier otra índole.
Después de trabajar diversas propuestas, el concepto que consideramos que respondía mejor a estos objetivos fue trabajar a partir de la inicial de Andalucía. Llegamos a la conclusión de que hay pocos elementos de identidad que puedan ser más incuestionables que la propia inicial. Históricamente las iniciales se han bordado en prendas, se han estampado en objetos y se han grabado en metal con el objetivo de identificar aquello que es nuestro y que nos representa, aquello de lo que nos sentimos orgullosos y que debemos cuidar y preservar. Por este motivo pensamos que inicial, la «A de Andalucía», era inequívocamente representativa de todos los andaluces y andaluzas, poniendo el foco absolutamente en la comunidad autónoma, por encima de cualquier otra consideración.
Una de las ideas presentes en el logotipo original de Alberto Corazón, era que el triángulo que representaba a Hércules también constituía una flecha que indicaba el camino ascendente. Este concepto se mantiene en la nueva imagen mediante la propia geometría de la «A» , que hace las veces de flecha ascendente, a modo de alegoría de esa Andalucía que mira al futuro con esperanza, fuerte y positiva.
A partir de este concepto se trabajaron diversas propuestas de icono basados siempre en la letra A. Finalmente se elaboró una A sin serifas basada en formas geométricas que facilitaran su uso y aplicación sobre cualquier tipo de soporte. No es una A totalmente simétrica en su construcción, siendo uno de los trazos sensiblemente más corto, lo que permite acomodar el arco inferior correctamente y evita generar un gran espacio vacío en el centro de la A, algo que reclamaba excesiva atención visual y generaba una imagen excesivamente estática, alejada de la idea de dinamismo y pluralidad que se trabajó en el concepto creativo. Finalmente uno de los trazos se representa en una tonalidad algo más baja generando la ilusión de tridimensionalidad, también representativa de esa Andalucía plural y viva.
¿Se trabajaron diferentes propuestas? ¿Hubo muchos descartes?
Como en todo proceso creativo se trabajaron diferentes propuestas. La premisa inicial era la de realizar un restyling de la imagen creada por Alberto Corazón y en esta línea se realizaron diversas propuestas que tenían un carácter formal desde el punto de vista del restyling y que seguramente podrían haber funcionado, pero no acababan de mostrar una evolución hacia esos nuevos códigos de comunicación que se planteaban en el briefing. Las diferentes propuestas y el propio trabajo creativo fue derivando en ideas que cada vez se alejaban un poco más del icono original hasta que surgió la idea de la inicial. A partir de ahí, aún siendo muy conscientes de lo arriesgado de la propuesta, decidimos que era la idea que mejor respondía a esa evolución que requería el proyecto.
¿Pudiste trabajar con total libertad creativa?
Sí, totalmente. Los únicos condicionantes que nos autoimpusimos en el propio equipo fueron los de documentarnos exhaustivamente para trabajar siempre con el máximo rigor y respeto a los símbolos ya existentes y el de tener siempre el foco en realizar el trabajo que considerábamos que podía representar mejor a todos los andaluces. El objetivo era llevar a cabo un trabajo honesto en el que creyéramos firmemente, por una cuestión de responsabilidad profesional y por compromiso con la propia comunidad. En ese sentido la Junta de Andalucía confió plenamente en nuestro trabajo y su intervención estuvo siempre focalizada en orientarnos sobre cuestiones formales referentes a organismos, entes institucionales y otras divisiones técnicas de la propia Junta de Andalucía.
¿Qué mejoras aporta sobre la anterior imagen de la Junta de Andalucía de Alberto Corazón?
Cuando se trata de una imagen icónica, brillante en forma y concepto y creada por uno de los referentes internacionales del diseño gráfico como es Alberto Corazón, me parecería totalmente presuntuoso hablar en términos de mejora. De hecho el objetivo nunca ha sido el de mejorar esa imagen, sino trasladar el discurso visual a la actualidad. En cierto modo que el resultado final esté tan alejado de la imagen original de Alberto Corazón me parece que es la conclusión más respetuosa hacia la marca creada por él.
Cuando un proyecto de esta envergadura ve la luz es inevitable que en RRSS aparezcan críticas, memes o parecidos razonables. Me imagino que algo te habrá llegado, ¿qué responderías ante las críticas?
Las críticas son totalmente lícitas y es sano aceptarlas. De hecho cualquier diseñador o creativo estará de acuerdo en que forman parte de nuestra profesión y aprendemos a convivir necesariamente con ellas. Cuando realizas un diseño destinado a un grupo tan amplio y heterogéneo y que además ha convivido con un símbolo de representación durante tantos años, es normal e inevitable que haya una reacción. Si además lo unimos a otras cuestiones coyunturales que está viviendo Andalucía, es perfectamente comprensible que esta reacción pueda ser adversa. Por supuesto al margen de todo esto también habrá quien sencillamente no le guste la imagen, algo totalmente lícito. Creo que hay que esperar a que todo se serene un poco y ver si con el paso del tiempo los andaluces y andaluzas le dan un voto de confianza a esta nueva identidad.
Respecto a los memes y parecidos razonables, es otra de las cuestiones inevitables y más aún si el icono está basado en una letra, como es el caso. No existirá A que no nos recuerde en mayor o menor medida a la de la Junta de Andalucía, especialmente cuando lo que se pretende es que esta letra tenga una forma absolutamente reconocible. Pero la identidad corporativa no la conforma únicamente la A, sino también una combinación de elementos tipográficos, cromáticos, de composición y de forma que hacen que esta A cobre una identidad propia.
En líneas generales ¿estás satisfecho con el resultado final?
Todo el equipo estamos satisfechos con el rigor, el compromiso y la absoluta implicación en el proyecto y en consecuencia con el compromiso que adquirimos con toda Andalucía. En ese sentido creo que se ha hecho un trabajo impecable. Si hacemos referencia estrictamente a la propuesta gráfica, tenemos total confianza en que el resultado responde a esos nuevos códigos de comunicación visual, que es representativo y perdurable. Pero la última palabra la tienen todos los andaluces, por supuesto.
Hasta el momento, y a falta de establecer el manual completo de uso, en las redes sociales podemos encontrar diferentes formas de aplicar la marca. Diferentes tratamientos tipográficos y colores de fondo que ofrecen muchas dudas sobre la nueva implementación de la marca.
Con la disparidad de aplicaciones que pueden verse en redes sociales y dada la magnitud del proyecto, se adivina que el trasvase hacia la nueva imagen será un proceso lento y costoso donde veremos alguna que otra atrocidad gráfica. En la web de la Junta de Andalucía puede consultarse el manual básico, que sí que está ya disponible y que todavía convive con los antiguos.
La creación del manual completo de identidad corporativa está por desarrollarse, y según nos cuentan, puede que se adjudique mediante concurso público.
Más información y manual simplificado aquí.
La A de Andalucía y de 123 RF…
https://es.123rf.com/imagenes-de-archivo/logo_a.html?&sti=nf9d2fvpvu7spznccs|&mediapopup=42496147
SI AL FINAL UNOS SE PARECEN A OTROS O ALGO, ES COMO EL ARTE ESTA TODO YA TAN SATURADO QUE DIFÍCILMENTE HAY ALGO DIFERENTE – ABRA QUE EMPEZAR A ASUMIRLO Y BAJAR MUCHO, MUCHO EL PRECIO